Las mujeres pueden ser débiles, pero las situaciones duras de la vida, las decepciones, las personas tóxicas que llegan poco a poco la van endureciendo, la convierten en una mujer fuerte. Sé que tú eres una guerrera, que luchas cada día para imponer tu opinión y pensamiento porque sabes que importa, porque sabes que necesitas valorarte y te aplaudo por ello.
Lamentablemente, cuando unas evolucionan, igual hay otras que pueden caer en las redes de un manipulador. Es triste, creemos que no es posible que aún hayan mujeres que permitan eso, que sean maltratadas y callen, que sean disminuidas y no hagan nada. Pero no podemos señalar porque como tú, todas tienen una historia. Cada mujer tiene una experiencia de vida que la va llevando a algo más, a algo nuevo que bien puede ser bueno o peligroso, y de acuerdo a lo que ella conoce y cree se va dejando llevar.
Así es como todas se van dando cuenta de las dificultades de la vida. Comprenden que no todas las personas son buenas, que hay quienes no tienen remordimiento al dañar, padecen el lado oscuro de otros. Muchas lo superan, se vuelven guerreras, pero hay quienes nunca logran salir de ello.
La mujer debilitada por un hombre manipulador tiene que aguantarse muchas cosas en esa relación, empezando por la imposibilidad de decidir por sí misma. Él la ha hecho tan débil que no sabe cómo actuar, ni siquiera sabe a dónde ir, necesita de su guía para vivir y hasta para respirar.
Además, necesita tener siempre su aprobación, él la ha confundido tanto que se convirtió en una mujer en extremo insegura. Si él dice que su color favorito es verde cuando toda la vida ella aseguró que era el azul, ella lo afirma, debe ser el verde porque él dice que es así y él siempre tiene la razón. Es algo deprimente y muy triste, lo peor es que seguro conoces mujeres así y se niegan siquiera a escuchar un consejo de tu parte por la misma razón, están dopadas de él y no quieren escuchar nada negativo de su pareja.
Una mujer débil controlada por un manipulador se aparta de todos sus seres queridos. Él le asegura que todas las personas que la aman y valoran solo quieren que ella sea infeliz, que lo quieren alejar a él de su lado porque tienen envidia del “amor bonito” que ellos dos tienen. Así que, aparte de tener que lidiar con él todos los días, se ha quedado sola, sin nadie a quien acudir cuando las cosas suben de nivel.
Esta mujer tiene que tolerar múltiples insultos a diario que en su mente son caricias y frases de amor. Un manipulador tiene la habilidad de hacerle creer que las palabras hirientes y el dolor que siente se lo inflige ella misma al molestarlo, al hacer las cosas de la forma incorrecta frente a sus ojos. Un manipulador es algo parecido a un demonio, uno de carne y hueso que no sabe de razonamiento, de sensibilidad ni empatía.
Por si fuera poco, debe apañarse siempre a lo que él quiera. Una vez que el manipulador toma control de su víctima la usará siempre para su beneficio, todo lo que ella quería y deseaba antes de él, desaparece, se vuelve inútil e innecesario. Ella no puede pensar por sí misma, tiene que servirle a él siempre.
Y peor, es tan astuto que frente a los ojos del mundo él es un hombre maravilloso, amoroso, respetuoso, que trabaja duro para que su pareja sea feliz, tenga todo lo que quiera y haga lo que quiera. Así que cualquier intento de una víctima de zafarse de esa horrible relación se traduce en que para los ojos de la sociedad ella será una adultera, una insensible, una mujer más que no valoró a un buen hombre.
Una mujer débil vive enjaulada con barreras impasables que solo ella puede ver. Si conoces a alguien así, no dejes de insistir, no dejes de luchar, aun cuando se niega. Quiero que entiendas que su disposición de no recibir ayuda es un síntoma más de la manipulación que hay ejercida sobre ella.
Es horrible de verdad y muy triste. Muchas jamás se liberan de relaciones así, pero si estás leyendo esto y te sientes identificada, espero esto te abra un poco los ojos. Necesitas alejarte de él.
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