Esas mujeres dominantes suelen ser las más fuertes, las que han superado más batallas y más corazones rotos. Han aprendido tanto de esas duras experiencias que han creado una coraza de protección con la que se defienden mientras intentan ser felices. Son mujeres asombrosas que no permiten que nadie las disminuya, alimentan su amor propio antes de alimentar el amor por una pareja.
Los siguientes son 10 puntos que hacen a las mujeres dominantes diferentes de las demás:
Tiene coraje y no se queda callada
Una mujer dominante jamás va a permitir que alguien quiera pisotear su presencia o su opinión. Ella no es sumisa ante las discusiones, defiende su posición a muerte y más si solo quieres imponer su idea. Para discutir con una mujer dominante debes tener argumentos válidos y siempre ser respetuoso.
Es independiente económicamente
Ella sabe que en la construcción de una relación hace falta el importe económico de ambos para conseguir todo lo que desean. Así que a ella le encanta costearse sus propios deseos y al mismo tiempo aportar a la relación como corresponde.
Es independiente emocionalmente
Ella puede amar mucho a un hombre, pero jamás va a permitir que su opinión y su presencia definan su vida y cómo vivirla. Ella sabe que tiene más cosas en las que enfocarse, así que por su propia salud mental no va a hacer que su vida gire en torno a un hombre.
Son ingeniosas
Son muy astutas y tienen un buen instinto para resolver problemas repentinos. No se dejan caer por la desesperación, ingenian buenas formas de solucionar cualquier situación difícil. Además, este aspecto les es muy funcional para cumplir sus metas personales y profesionales.
Tienen un gran sentido del humor
Estas mujeres dominantes son divertidas y siempre tienen una buena actitud frente a la vida. Tienen buen sentido del humor, jamás te puedes aburrir con ella, saben cómo mejorar el ambiente para que todos se sientan a gusto.
Son comprensivas, tienen mente abierta
Sí, ella tiene una personalidad dominante, pero eso no significa que tenga un alma egoísta y reservada ni que sea una persona pedante con complejo de superioridad. Para nada, por el contrario, ella tiene una mente abierta, es consciente de que todos deben tratarse por igual, y por ello es muy comprensiva con las personas.
Son inteligentes en la intimidad
Saben muy bien cómo desenvolverse en la cama, son amantes apasionadas que quieren satisfacer sus deseos y brindarle mucho placer a su pareja. Son astutas y les encantan probar cosas nuevas sin sentir vergüenza, son muy seguras de sí mismas, de su cuerpo y de quiénes son y no le niegan a los deseos la satisfacción.
No toleran los celos
Las mujeres dominantes desprecian los celos en los hombres; cuando ella abre su corazón a una persona, esta tiene que aceptarla y sentir la confianza de que así es, de lo contrario se alejará. Ella no está dispuesta a tolerar escenas ridículas de celos.
Están muy seguras de sí mismas
Una mujer dominante es una mujer muy segura de sí misma, tienen gran confianza en sus habilidades y en su potencial. Saben que lo que se proponen lo logran y no le tienen miedo a los retos. Además, ella sabe lo que es y lo que tiene, así que no tiene por qué sentir temor de que un hombre la engañe, no se crea historias en su cabeza. O están o no están con ella.
Siempre dicen la verdad
Una mujer dominante siempre será honesta, aunque la verdad sea dolorosa, aunque pueda generar algún problema, nadie la va a convencer de ser falsa. Ella muestra sus verdaderos colores y dice su opinión sin inmutarse, sin dudarlo.
¿Y tú, eres una mujer dominante?
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