Una vez leí que la mujer infiel no existe, simplemente alguien más le ofrece lo que un hombre deja de darle. A veces, creen que porque la llevan al altar o la presumen frente al resto ya les pertenece. Están muy equivocados, ella puede estar enamorada hasta los huesos de alguien, pero esa persona es la misma que puede acabar con lo que siente. Hay 15 señales que dejan claro que ella ya encontró refugio y desde hace tiempo.
La infidelidad femenina es tan real como la masculina, pero las mujeres suelen ser más discretas, porque rara vez se trata de un impulso arrebatado. Basta con indagar un poco para ir al trasfondo de todo. Si ella siente insatisfacción, reproches, críticas y poco amor, caerá en otros brazos. A diferencia de los hombres no se trata de algo meramente carnal, la atracción no es suficiente. Ellas necesitan sentirse queridas, escuchadas, amadas y deseadas. Alguien que las traiga de vuelta al cortejo. Quizás ella ya lo encontró:
Anda en la Luna: Una mujer enamorada no puede fingir mucho, basta con que la mires fijamente para darte cuenta de que no guarda nada de información, se le olvidan las cosas y de la nada sonríe. Es porque esa persona ya tiene un sitio especial en su corazón.
Renueva su vestimenta: Da igual si no tiene tiempo de ver a esa persona, pero al menos aprovecha sus redes sociales para subir alguna fotografía en la que se vea linda. De nuevo cuida su apariencia y no le interesa tu opinión, lo único que quiere es la aprobación de su amor secreto.
Se le ve más aburrida que nunca: Una mujer infiel empieza a ver sin filtros a su pareja y la llama de la atracción se apaga. Ahora tiene pretexto para todo y no le dan ganas de hacer nada nuevo. Ya ni siquiera el drama de las discusiones la hace reaccionar, prefiere ignorar y ya.
Quiere salir sola: A ver, una mujer tiene todo el derecho de divertirse a solas con sus amigos, pero si últimamente ya no quiere que la acompañes a ningún sitio, es porque claramente te está evitando y no quiere sentirse incómoda ni hablar de lo que le está pasando. En especial, porque seguramente sus amigos ya lo saben.
Un futuro incierto: Ahora no le emociona hablar del futuro, aquellas pláticas en las que se imaginaba envejeciendo a tu lado ya desaparecieron. Sin embargo, habla de ella a solas y es señal de que lo suyo se está esfumando.
Su teléfono se volvió sagrado: Por lo regular, una mujer infiel no tiene todo el tiempo del mundo para estar con la otra persona. Así que el teléfono se vuelve su mejor compañero. No quiere soltarlo porque una llamada o mensaje, puede hacer que las cosas se desmoronen.
Se volvió fría en la cama: Hay algunas mujeres a las que no les afecta tener relaciones con su amante y siguen manteniendo la chispa bajo las sábanas con su pareja. Sin embargo, cuando hay una conexión emocional la cosa cambia, ya hasta los besos le incomodan y no quiere hacer nada más.
Planes y más planes: De pronto, su agenda se volvió más saturada, ya no tiene tiempo para estar contigo, porque quiere invertirlo en otra persona.
Ni hablar de matrimonio: Si esa mujer todavía no es tu esposa, entonces no va a querer hablar nada de casarse. Su mente es un caos y lo que menos quiere es sentirse obligada a estar contigo.
No te incluye en sus metas: No es que antes no tuviera sueños, pero de repente algo más la motiva y quiere hacer tantas cosas en las que claramente no estás incluido.
Mentiras extrañas: Vamos, que de las mentiras piadosas ya no queda nada. Una mujer infiel es capaz de muchas cosas para que no la descubran, no quiere perder tu confianza y pondrá sus mejores cartas sobre la mesa, eso ni lo dudes.
Sin explicaciones: Ahora goza de su libertad, no quiere sentirse atada a ti y por eso no está dispuesta a decirte nada. Se siente tan abrumada que es capaz de decirte que pienses lo que quieras y punto.
El enfado no falla: La técnica de la frustración para evadir las verdades. Cuando el ser humano experimenta un cambio de humor repentino, es señal de que se siente amenazado, no quiere ser descubierto y por ello se enoja y ataca.
Los nervios hablan por sí solos: La mujer infiel está enamorada, son sus sentimientos los que se ponen de cabeza y ahí es cuando los nervios la traicionan. Tú la conoces, sabes cuando algo la hace sentirse fuera de lugar. Basta con que toques el tema de una tercera persona para que se sienta vulnerable.
Nuevos intereses: La ley del espejo, de pronto esa mujer se siente muy interesada por lo que hace y deja de hacer la otra persona. Así que es muy común que sus pasatiempos cambien, quiere sentirse parte del mundo del otro. Se vuelve fascinante para ella y lo demás le aburre.
Si tú eres la que estás siendo infiel, sólo sé cautelosa, date cuenta de que estás eligiendo unos nuevos brazos y que es probable que tu pareja te deje. No es sano quedarte al lado de alguien que es bueno si lo vas a romper de esa manera. Antes que nada sé sincera contigo, pon en orden tus ideas, porque quizás no valga la pena como piensas. ¿Realmente le importas al otro?, ¿Vale la pena perder todo por algo pasajero? Estás traicionando su confianza y al mismo tiempo traicionas tu esencia.
Tú sabes que no eres amada, porque si así fuera jamás hubieras besado otros labios. Entonces, ¿por qué te sigues mintiendo? Déjalo, para que puedas amar de verdad.
Texto orinal: albertespinola.com © Todos los derechos reservados.