Entiendo que siempre quieras ver lo bueno en los demás a pesar de sus malos días, pero de vez en cuando necesitas apañarte más a la forma en que actúan contigo, es decir, a lo que te muestran a ti de su personalidad. Está bien que intentes comprender el porqué de las acciones de otros, pero no puedes basarte siempre en ello pues no puedes permitir que las personas te dañen solo porque creas que en el fondo “tienen buenas intenciones”.
Las personas son lo que son, pero tienes que ver lo que te dan a ti. Si solo ves lo bueno en ellas, podría ser contraproducente para ti. De hecho, ese el inicio de cualquier relación tóxica, es decir: apelar siempre al lado bueno de las personas a pesar del obvio mal trato que ejercen sobre ti. Puedes juzgar el carácter de las personas por lo que conoces de ellos y darles el beneficio de la duda, sin embargo, siempre debes tenerte a ti mismo en primer lugar.
Ese amigo, ese familiar, ese compañero de trabajo o esa pareja que ha demostrado tener aspectos buenos, pero que te tratan como una propiedad o con desdén, debes alejarlos de tu vida. Sin importar qué tanto te importen, siempre debes pensar primero en ti. Pues muchas veces amamos personas que sabemos que no son buenas para nosotros. Muchas veces nos dejamos llevar por las emociones sin ver lo infeliz que somos a su lado.
Es por ello que a veces, necesitas dejar de mirar lo bueno en las personas y ver lo que te muestran de sí mismos. Que alguien te ame no justifica que sea violento contigo, que alguien te considere apreciado no significa que deba pasar sobre ti, que alguien te elogie no le da derecho a tomarse atribuciones contigo. Abre los ojos, ya no les des tu tiempo, tu energía y tu vida a quienes no te ofrecen su mejor parte de sí mismos.
Aduéñate de tu vida y no permitas que jueguen con tus emociones. Habrá quienes apelen a tu lado compasivo para seguir siendo parte de tu vida haciendo que te enfoques en su lado bueno y no en eso que no te hace bien. Debes ser fuerte y alejarte de esas personas. Debes ser valiente y decir “ya basta” a esas manipulaciones. No te aferres a lo bueno que crees conocer de las personas viendo cómo con sus acciones te destruyen.
Está bien que resaltes las cualidades positivas de otros, pero no te quedes solo con ello. Mantente alerta, no siempre te tiene que gustar todo de una persona, es imposible, pero si hay partes de ella que te hacen daño, no es algo que tengas que tolerar. No le debes nada a nadie, primero lo primero y ese es tu bienestar físico y emocional.
Así que nada de tolerar comportamientos tóxicos solo porque “en el fondo es una buena persona”. Respétate, ámate y valórate. No consientas en tu vida personas que te hacen daño.
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