De las personas más importantes que puedes apreciar en tu vida están esas que simpatizan contigo en todo lo que te sucede. Quien hace eso es alguien que le importas, alguien que dependiendo de cómo tú estés y te sientas, así se sentirá. ¿Por qué? Porque se conecta a un nivel más profundo contigo. Así que aprecia a esa persona con todas tus fuerzas y valórala.
Jamás des por sentado su cariño por ti, esas amistades o esas personas empáticas que pueden ser también un familiar o tu pareja, tienes que tratarlo con amor y alimentar ese cariño. Los aprecias, pero también tienes que hacer tu parte para que se queden cerca de ti. Nadie que sienta que no es querido de la misma forma se queda por mucho tiempo. Si le haces sentir que está perdiendo su tiempo contigo, ese afecto que siente hacia ti se va desvaneciendo.
Por lo tanto, apréciala, y de la misma forma, siéntete feliz cuando está feliz, pero si no te sale natural, entonces aléjate y no le hagas daño fingiendo que te importa.
Todos merecemos recibir igual o más del amor que damos. Así que esa persona fantástica que se alegra genuinamente cuando tú triunfas y que se entristece y te ayuda cuando estás mal, valórala, quiérela, trátala igual. Se trata de una persona fantástica, una persona única que no consigues a la vuelta de la esquina. Esas personas son sumamente especiales, de esas que aun valoran cómo se sienten los demás sobre sí mismos.
Quienes muestran recelo cuando triunfas y que aunque traten de esconderlo sientes su mala energía, a esas aléjalas de ti. Eventualmente son perjudiciales, dañinas, TÓXICAS. Una persona que no es capaz de alegrarse por tu triunfo no es tu amigo, no te aprecia y ciertamente no le interesa que seas feliz. Esas personas no puedes mantenerlas en tu vida. Si tienen una especie de amistad es porque hay un interés de por medio. ¿Vas arriesgar tu bienestar emocional por alguien que no le importa en lo absoluto tu estado emocional?
Puedes deducir muy bien quiénes te aprecian de verdad por sus actitudes en tus momentos más altos y más bajos. Y sin duda, las que más debes apreciar son las que celebran tu felicidad y forman una fiesta porque están muy felices por ti, y los que se acongojan por tus tristezas y fracasos y se quedan a tu lado para que no te sientas solo. Esas personas que te recuerdan que sin importar las circunstancias que atraviesen siempre estarán a tu lado apoyándote.
Te sostienen la mano cuando necesitas compañía, te ponen el hombro cuando quieres llorar, te defienden a muerte si estás en problemas, lloran contigo si has perdido algo o alguien.
Conserva a esas personas en tu vida, cobíjalas de la misma forma que hacen contigo, esas son las más queridas en tu vida.