Una vez leí que no hay gente mala, hay gente infeliz, porque quien está bien consigo mismo no tiene tiempo de amargarle la existencia a nadie. Sin embargo, creo que no es justificación, porque allá afuera hay un montón de gente herida, que prefiere tragarse sus palabras y apretar fuertemente los nudos en su garganta, antes de dañar. La vida es así, son contadas las personas en las que puedes confiar y nunca tienes la certeza de que será algo para siempre, porque con el paso del tiempo te pueden traicionar. ¿Cómo detectar a la gente mala que te sonríe de frente y te ataca por la espalda?
Es real, cada persona está viviendo su propio proceso, se vale ser empático, pero no adornar las señales que te están gritando que ahí no es. Las cosas malas son inevitables, son lecciones duras que la vida nos da y hay que asimilarlas. Lo mejor es no guardar resentimientos, porque eso significa un desgaste emocional que no te mereces. Aunque, ya es tiempo de que pongas límites y entiendan que no te van a seguir viendo la cara.
Huye de la gente mala
Así como hay quienes llenan el mundo de amor, magia y calma, también están los que nos provocan el efecto contrario. Hay quienes derrochan egoísmo en sus pasos y se nota que están contigo porque les conviene. Te estoy hablando de personas calculadoras, que te critican y te ofenden cada vez que pueden. Esas son las que deberías alejar de tu vida, porque en lugar de dejarte huellas bonitas te llenan de cicatrices.
De ese tipo de personas sólo quédate con las lecciones y aprende a no ser como ellas. Está bien que dejes salir tus emociones, si te hacen llorar o te provocan dolor, pero no te enganches, porque ese es su objetivo. Deja que sea la gente mala la que siga en el drama, tú no mereces toda esa tensión. Se vale aceptar que te equivocaste, que confiaste en la persona incorrecta, acepta, afronta y luego deja ir. No hay más, hay que abrazar la madurez emocional para liberarnos de toda esa mala energía.
Pasos para detectar a la gente mala
Ojalá que cuando conociéramos a una persona, incluyera un aviso en el que te explica cómo puedes salir de lastimado al involucrarte con ella. Pero no, la vida no es tan dulce como quisiéramos y por eso es importante que prestes atención a estos pasos. Creéme, te van a salvar de momentos decepcionantes:
Te hacen sentir incómodo
A veces, te obsesionas tanto en cumplir un objetivo, que dejas de lado tus emociones. Escucha a tu voz interior, cree en la energía que te transmite la otra persona. Si al conocer a alguien algo no te vibra bien, no lo ignores. Lo peor que puedes hacer es obligarte a lidiar con una persona, porque al pasar el tiempo vas a confirmar que tu alma no estaba equivocada, sus acciones te terminarán decepcionando.
Vete a la primera
Vamos, sé que duele muchísimo decirle adiós a un amor, familiar o un amigo. No es fácil enfrentar la verdad y darte cuenta de que esa persona nunca ha sido genuina y que sólo está contigo para echar todo el veneno que trae dentro. La gente mala miente, te envidia, habla mal de ti con otros. Deja de perdonarla, no dejes que el amor que tú sí sientes te ciegue, no permitas que siga siendo parte de tu vida, porque hará que se vuelva un calvario. Perdonar no significa que tenga que continuar la relación. A veces, por salud mental y emocional, no queda más que cortar el lazo.
Juegan con tus sentimientos
El regalo más bonito que te puedes dar, es aprender a decir que no. Hay gente mala que es lo único que merece de ti. Porque se atreven a lastimarte después de conocer tu historia. No hay nada más cruel que alguien que usa tus debilidades para seguirte rompiendo. Aléjate de las personas manipuladoras, porque esas no se tocan ni un segundo el corazón para salirse con la suya.
Sin remordimiento
Es claro, tú también tienes un lado oscuro, como todos. Hay cosas que has hecho y has quedado como el villano del cuento. Sin embargo, muchas veces no es de manera intencional, eso es lo que te hace diferente de la gente mala. Porque esa gente no tiene el más mínimo remordimiento e incluso en algunos casos les satisface ver mal a los otros. Presta atención en cómo habla de las otras personas, porque de la misma manera que se expresa de ellos lo hará de ti.
Lo disfrazan de sarcasmo
No confundas la inteligencia con ser buena persona, porque hay quienes tienen una vibra sumamente negativa y una mente de dioses. Tienen la capacidad de insultarte, menospreciarte y criticarte, de una manera, según ellos, sutil. Es el sarcasmo su mejor aliado, se hacen los chistosos para romper con tu autoestima y después tienen el cinismo de preguntar por qué te sientes tan inseguro. Necesitan hacerte sentir mal para ellos sentirse bien frente al resto.
La desgracia les causa sonrisas
Una persona que es mala carece de empatía, le resulta imposible ponerse en los zapatos de los demás y es por eso que cuando le cuentas algo que te está sacudiendo la mente y el corazón, lo minimizan. No sólo eso, se atreven a hacer chistes de tu dolor. A veces, no lo hacen contigo, pero con los demás sí. ¿Qué estás esperando para sacar a esa persona de tu vida? No merece que le des un asiento a tu lado vulnerable, te hará daño.
Están desconectados
Por supuesto, que eres un ser individual, está bien que tengas tus planes y que trabajes duro por ellos. Sin embargo, la gente mala se olvida de la unidad, al final todos necesitamos de todos. Es así, pero ellos no se conmueven con nada, al contrario, se deslindan de responsabilidades y mantienen sus emociones al margen. No quieren conectar a un nivel profundo, prefieren tener relaciones superficiales, porque así no pierden el control de lo que hacen.
¿Cómo tratan a los animales?
Las personas crueles descargan toda su furia con aquellos que no se pueden defender del todo. Es por eso que se enredan con gente que está pasando por situaciones vulnerables. De ahí que los animales son su presa perfecta, no pueden expresar el maltrato y se aprovechan. Si quieres saber la energía de alguien, nota cómo reaccionan los animales ante su presencia. Esa es su verdadera cara.
Aires de superioridad
Una persona que te hace sentir poca cosa por la manera en la que vistes, el sitio en el que vives, tu trabajo, tu apariencia física, no merece ser parte de tus días. No permitas que sus vacíos te afecten, hay algo en ti que no toleran, tu magia natural. Por eso necesitan apagarla de una u otra manera.
Se enganchan en lo negativo
Finalmente, una persona mala es aquella que no pierde ninguna oportunidad para quejarse de todo lo que sucede a su alrededor, incluso de cosas muy lejanas. Hablan mal de su familia, su pareja, amigos, de ti. Siempre encuentran la manera de ver a los demás por encima de sus hombros. Nadie hace las cosas tan bien como ellos. ¿Ya recordaste a alguien?
No hay más qué decir, el mundo es así, hay muchos que van por ahí soltando su veneno y no van a cambiar. Sin embargo, tú tienes la responsabilidad de tu tranquilidad, no te corresponde a ti cambiarlos, pero sí ponerles un alto. Puedes querer muchísimo a una persona, pero quítate la venda de los ojos. Te está dañando y nadie que te daña merece una oportunidad.
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