Las señales de que una persona está siendo infiel pueden ser bastantes claras, aunque por supuesto, hay quienes saben hacer tan bien sus jugadas, que saben cómo simular cada uno de sus movimientos. Sin embargo, cuando el engaño no se trata de una infidelidad con un objetivo carnal, si no que se trata de un desarrollo constante de amor, las señales pueden variar e incluso el mejor de los mentirosos puede perder la cordura y quedar expuesto.
Cuando tu pareja pasa de un engaño circunstancial a despertar amor por alguien más, ocurren síntomas muy evidentes. Lo primero es el alejamiento emocional. Cuando una persona está siendo infiel pueden ocurrir dos cosas en el área de la intimidad, o bien compensan el error que están cometiendo con mayor contacto y más amor para “disimular”, o los encuentros físicos íntimos empiezan a disminuir. Ambos son posibles y ninguno tiene que estar relacionado con la presencia de amor hacia otra persona, más bien podría deberse a la ausencia de cariño.
El engaño por atracción física hace que el infiel se sienta sucio, que se sienta mal porque le está fallando a quien es su pareja y por ello sobre compensa con más detalles, con más pasión a la hora de ir a la cama, o con más demostraciones de afecto. Ahora bien, cuando empieza a amar a otra persona, su alma se va fragmentando, en vez de compensar, se va desprendiendo.
Se siente mal en un nivel más profundo, puede sentir cómo su vida ya no tiene una conexión profunda contigo, que ya no siente la necesidad de una vida a tu lado. Esto implica consecuencias graves en ambos, pero hay que ser honestos, es una situación que puede ser impredecible y a veces, inevitable. En las relaciones intervienen muchos factores y la fidelidad depende ampliamente de la voluntad y el compromiso de cada persona.
Pues cuando ese compromiso deja de ser algo real, es porque está llegando el enamoramiento. Y algunas de las señales más evidentes de que tu pareja te está dejando de amar y está empezando a amar a alguien más son la disociación emocional, la reducción del tiempo que pasan juntos y la mirada de amor y pasión que siempre le caracterizaba se transforma en una mirada de tristeza y culpa.
Además, empieza a darle un nuevo enfoque a su vida, la influencia de esa nueva persona en sus decisiones le hace ver su futuro de forma diferente por lo que, incluso los planes que ya tenga hechos, pueden cambiar drásticamente de un momento a otro. Quien empieza a enamorarse de alguien más cambia hasta el tono de su voz, se vuelve más callado, más tranquilo. Y todo eso es causado por el sentimiento de culpa.
Quien engaña creyendo que se trata de algo pasajero, siempre entrará en negación porque no quiere perder la seguridad que tiene contigo, pero cuando se empieza a enamorar la negación puede sentirse como algo absurdo. Empiezan una especie de auto examinación y terminan totalmente confundidos sobre qué hacer con sus vidas.
Si tu pareja está amando a otra persona, empezará a demostrarlo hasta en pequeños detalles, cambia su forma de hablar, la forma en que se dirige a ti, hasta el nombre que usa contigo, cambia su forma de vestir, el horario de trabajo, las amistades. Sufre una transformación que podrías confundir con una “total entrega hacia ti” cuando en realidad se está entregando a alguien más.
Si ves estas señales, por favor, no esperes hasta que la herida se haga más profunda y el engaño incontenible. Debes pararlo, debes parar la situación y tomar las riendas de tu vida una vez más.
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