En este post, vas a ver cómo olvidar a tu ex partiendo desde tu amor propio. Es que te liberará de los apegos y te ayudará a salir adelante frente cualquier circunstancia.
Te duele tanto que ya no logras concentrarte en las palabras que salen de tu boca. No quieres mirar a nadie y mucho menos ver a una pareja por allí tomada de la mano. Es tan duro que sientes que el corazón se quiere detener cuando los recuerdos llegan. Hay personas que aunque nos hacen daño, las amamos tanto que las tenemos allí erizándonos la piel con solo recordar.
Cuando amas tan profundamente es mucho más difícil reducir ese sentimiento, pero no es imposible y forzarlo es inútil. Querer sacar de tu corazón el amor que sientes por una persona no te hace bien, por el contrario solo te hace rememorarlo mucho más y podrías sembrar nuevos sentimientos hacia esa persona ya sean de más amor o de odio.
Dejar de amar no es algo que logres hacer con solo decirlo, el amor no se borra, lo que ya viviste con una persona no puedes simplemente anularlo. El amor queda latente, pero el tiempo lo apaga. Lo va reduciendo poco a poco hasta que tu mente es capaz de verlo en más detalle como una experiencia y no como una fantasía.
Al final te contaré algunos ejercicios que te ayudarán, pero mientras: Lo que sí puedes hacer es ocupar tu mente. Cuanto te ocupas y te mantienes entretenida en cosas que te interesan dejas de percibir esas señales de dolor que te causa el recordar. Hace que el dolor sea menos, hace que el amor se vaya desvaneciendo. Y no es que tengas que olvidar el afecto que le tienes, ni siquiera tienes por qué hacerlo, no te arrepientas jamás de las cosas que has vivido, cada momento ocurre por un motivo.
Solo preocúpate por acabar con el enamoramiento. No puedes olvidar a una persona, no puedes borrar de tu mente lo que han vivido, no tienes que anular los recuerdos hermosos, no, nada de eso. Cada recuerdo es parte de tu vida, en lo que tienes que trabajar es en acabar con el efecto que te ocasiona cada memoria a su lado.
Ocupa tu mente y empieza a amarte más a ti misma. Es muy difícil dejar de amar, no puedes manejarlo, no hay una fórmula para ello. Pero lo que sí puedes controlar es tu vida, tus acciones y tus decisiones. Si tomas parte de tu tiempo para hacer algo que te encanta, te aseguro que en todo ese tiempo que te dediques a ello, él no cruzará por tu mente. Trata de hacer algo que haga que tu cuerpo y tu mente necesiten el máximo de su potencial.
Así consigues hacer algo muy bueno por ti misma y a medida que pasa el tiempo la forma intensa en que pensabas en él va decayendo. Te vuelves más analista que pesimista. Lo empiezas a ver como una experiencia de la que debes aprender algo y es que hasta que no cortes esa conexión profunda no serás capaz de ver qué es lo que debes aprender.
Dejar de amar a esa persona que te duele tanto en el pecho no es cosa fácil. Sin embargo, tú puedes mantenerte en movimiento, mantenerte activa haciendo una cosa tras otra para ayudarte. No hay necesidad de acudir a métodos extremos para dejar de amar como involucrarte con alguien que no amas. Hacer eso es empeorar tu condición y herir a alguien más.
Solo ten calma, siente el dolor que debas sentir, eso también es parte de la superación. No te fuerces a nada que no quieres hacer, poco a poco el tiempo te ayudará a dejarlo ir.
Ejercicios que te pueden ayudar a olvidar a tu ex
Meditación: La meditación ayuda a sanar tu mente de apego. Genera claridad de pensamientos y aumenta tu despertar. Por lo que el adormecimiento que te genera el apego, y el dolor, quedarán en segundo plano cuando decidas practicar esta actividad. Hazla por lo menos 4 veces al día por 10 minutos cada vez.
Cultivo de atención: Parecido a la meditación, de hecho es una meditación, pero que la practicas a cada instante de tu día día. El cultivo de atención, te mantiene en claridad y presencia absoluta. Cuando practicas cultivo de atención, las mentes insanas de apego y sufrimiento no pueden existir, ya que ambas, junto al cultivo de atención, en ti, no pueden convivir.
Para practicar este ejercicio, sólo debes estar presente todo el tiempo, y observar esos pensamiento en ti como venenos que no te pertenecen. Debes ser la mujer madura que al ver dichos pensamiento, los identifica como que son pensamiento de una niña pequeña que no ha vivido y que no tiene experiencia, y que no eres tú quien los genera, sino tus apegos, demonios o insalubridades mentales. (Más adelante hablaré de este ejercicio con más detalle en otro post). Si te interesa mucho, me lo puedes mencionar en los comentarios).
Escribir: Escribir acerca del pasado te ayudará a sanar y a soltar eso que ha quedado tan incrustado en tu mente y alma. A veces por miedo a confrontar la realidad del pasado o presente, puedes hacer vista gorda y eso te genera sufrimiento. El sufrimiento se da por no querer confrontar eso que debe asumir y afrontar. Escribe en un cuaderno diariamente todo aquello que debes expresar. Verás cambios pronto en tu vida.
Deporte: Este siempre es mencionado y es que no es para menos. El ejercicio físico te ayuda a estar presente, es como una meditación que te mantiene en el aquí y el ahora y te ayuda a liberar endorfinas. Esta son sustancias químicas que te aportarán bienestar y placer sin generar adicción y te ayudarán a olvidar con más rapidez.
Los deportes que más liberan endorfinas son: Nadar, correr, caminar o el CrossFit.
Yoga: Sin duda, esta actividad genera un alto grado de cultivo de atención. Da unos resultados increíbles en las personas que lo desarrollan o practican.
Estas son algunas actividades que te pueden ayudar. Y en futuros post daré mas detalles de que cada una de ellas para que las puedas desarrollar al máximo.
Hoy por hoy, te invito a que empieces a despertar y te des cuenta de que todo lo que estás sufriendo son apegos, no es amor. Reconoce que sufres porque tienes miedo vivir. Analiza bien esto.
Y por último, recuerda: al final de cuentas no se trata de olvidar, sino de aceptar que esa persona yo no estará más tiempo a tu lado. Y sé que suena mal decirlo, pero sí: Calmando tus propios vacíos.
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