El amor es así, impredecible, llega a tu vida como la humedad, pero cuando menos te das cuenta ya lo tienes impregnado en cada rincón de tu alma. Sin embargo, no confundas amar con el enamoramiento, porque podrías dejarte llevar a tal grado que tu parte consciente se pierde y ahí es cuando le abres las puertas a la persona equivocada. Hay hombres que encantan, te envuelven con su aroma, esa voz grave, la fuerza en sus manos, son los que te entran por la mirada, pero una vez que vas descubriendo sus heridas te rompen. No es que hayan cambiado de la noche a la mañana, las señales estuvieron ahí, pero lamentablemente decidiste ignorarlas. Por ello, hoy quiero recordarte que hay tres tipos de hombres de los que nunca te debes enamorar.
Los rasgos de personalidad no se pueden esconder tan fácilmente. Quizás, al principio el deseo de agradar a la pareja los mantenga a raya, pero conforme todo va avanzando muestran su verdadera cara. Esa que te fragmenta la autoestima y hace que tu dignidad termine por los suelos. Nadie dijo que las relaciones afectivas son fáciles, requieren compromiso, ganas verdaderas de tomar la mano del otro y construir una vida juntos. No es mágico, hay que regar la plantita las veces necesarias para que empiecen a brotar las flores.
No estás sola
Lo primero que quiero decirte es que no estás sola. No eres la única mujer que ha creído en un amor insano. No seas tan dura contigo misma, ya has pasado antes por situaciones dolorosas, vas a salir de esto. Tienes que confiar, porque sé que no va a ser fácil darte cuenta de que la persona que crees que es la correcta, cumple con algunas de las características que te voy a mostrar más adelante.
Si ya estás en un vínculo tóxico, pide ayuda a un especialista, no permitas que tu orgullo haga que te quedes al lado de alguien que no te hace sentir bien. Las relaciones afectivas son sinónimo de cambiar constantemente, nadie es la misma persona que ayer, pero eso no justifica que se haya convertido en un ogro, que disfruta al ver correr las lágrimas por tu rostro. No te aferres a esta idea del príncipe azul, eso provoca que lo adornes, que niegues todas esas manías y defectos que te hacen sentir poco amada y menospreciada.
Sé que parecía encantador, que sus palabras fueron entrando poco a poco en tu mente hasta convertirse en el dueño de tus pensamientos. Te prometió que estaría en las buenas y en las malas, que no te dejaría a tu suerte y que jamás se atrevería a remover las cicatrices de tu pasado. Sin embargo, desde que está contigo no ha hecho otra cosa que tratarte con la punta del pie. ¿Te suena familiar? Bueno, presta atención a los tres hombres que no merecen ni un segundo de tu tiempo.
No te enamores de estos tres hombres
Un hombre que tiene la suficiente madurez emocional, no necesita de ti las 24 horas del día. No te hagas la idea de que lo hace por amor, porque querer controlar todo en tu vida no es amar. Tampoco que te cele sin motivo o que todo el tiempo arme un escándalo sólo porque no quiere que lo dejes. Los chantajes no tienen nada que ver con el amor, pero sí con la carencia del otro. No te hagas esto, estás cargando con un montón de heridas que a ti ni siquiera te corresponden. Si el hombre es narcisista, territorial o posesivo. De verdad, sálvate y sal de ahí.
PEXELS
Se cree superior
Un hombre que se cree superior al resto, es alguien que no tiene ni la menor idea de lo que es querer. No está listo para dar algo que no se da a sí mismo, le hace falta trabajar en su amor propio y aunque lo disimula muy bien desde hace tiempo perdió el último resto de su autoestima. Está contigo porque sabe que puede manipularte a su antojo, quiere dejarte muy claro que es él quien lleva el timón de todo y que cuando algo no le parezca se va a marchar. Haciéndote creer que no vas a encontrar a alguien que te quiera de la misma manera.
Si te quedas a su lado, no sólo te va a romper a nivel emocional, también mental y en unos casos hasta físico. Su objetivo es que tú te conviertas en una pieza más de su vida y nada más. Te quiere, pero mientras te quedes bien calladita y hagas lo que sea para cumplir sus peticiones. Es quien te va a llenar la cabeza de todas sus aventuras y triunfos, porque todo gira a su alrededor. Se esfuerza por ganar el reconocimiento del público. Es el tipo de hombre que no perderá la oportunidad de decirte que eres demasiado afortunada por haberlo conocido.
Es muy territorial
Me gustaría que hicieras un pequeño ejercicio, gira tu cabeza, observa justo esa pared que tienes delante, ¿Qué le dirías? Nada, no tiene caso tirar palabras al aire si no vas a obtener una respuesta. Exactamente, eso es lo que significa tener una relación con un hombre que es muy territorial. No le vas a ganar, es irracional cuando quiere defender un punto y prácticamente le importa poco lo que tengas que decir. Es el mismo tipo de hombre que te va a decir que no le gustan las etiquetas, que quiere que todo fluya y no perder el tiempo en esas tonterías.
Está muy desconectado y le da igual. Su nivel de empatía es nulo, tu dolor no le va a doler y si algo te causa felicidad, es posible que te felicite, pero en realidad no tiene la capacidad de ponerse en tus zapatos, porque no quiere. Quedarte al lado de un hombre así, es convertirte en su fantasma, esa sombra que siempre va a su paso, pero a la que ignoran. No te permitas acostumbrarte a ese tipo de malos tratos. Amar es sentir al otro y que él también te sienta. Se requieren agallas para conectar a un nivel emocional profundo. Es mentira eso de que así es su manera de amar, porque para empezar eso ni siquiera es amar.
Es muy posesivo
Este es el tipo de hombre que quiere que lo vean sí o sí, no le importa nada más que hacerse presente y gritarle al mundo que alguien le pertenece. Es muy peligroso, porque las mujeres suelen confundirlo con un hombre encantador, el que se preocupa todo el tiempo porque quiere saber qué, cuándo, con quién y por qué salió su pareja. Tiene una infelicidad tan profunda que le resulta imposible tener un vínculo sano.
Es el que desconfía de todo, se estresa por todo y te acusa por todo. Te hace sentir culpable por disfrutar de tu libertad, porque cuando empiezas a convivir con el resto se hace la idea de que te está perdiendo y eso aumenta sus inseguridades. Quiere que le digas, que le perteneces, que te controla y que él sabe lo que sirve y lo que no. Es quien supuestamente te lleva por el buen camino, pero simplemente no quiere que te le salgas de las manos, te trata como si fueras su marioneta. Es el hombre que va a aparecer cuando no lo esperas, invade tu espacio, no respeta tu individualidad y se obsesiona por saber tu ubicación las 24 horas del día.
No mujer, no te mereces un hombre así, tú estás para que te amen de verdad, no como en los cuentos de hadas, como se quiere cuando eres consciente y no vas arrastrando fantasmas del pasado. No te engañes, si dejas pasar más tiempo después será peor. Si crees que no puedes busca ayuda, eso es mejor que perder toda una vida al lado de alguien que no te ama.
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