De pronto, algo se apaga, no dicen nada, pero sabes que lo suyo cae cada vez más. Es muy doloroso cuando tu pareja no quiere tener relaciones y es la que se convierte en un extraño. Están tan cerca y a la vez tan lejos, que te sientes frustrada. Te preguntas si estás haciendo algo malo, si el amor se acabó o si tiene a alguien más. Nadie merece vivir en ese calvario. Por ello, es indispensable poner las cartas sobre la mesa, ¿Por qué tu pareja no quiere tener relaciones? Las ganas desaparecen por muchas razones: estrés, cambios bruscos, trastornos, enfermedades, traumas no resueltos, la lista puede ser interminable.
De ahí que lo primero que te recomiendo es que mantengas la calma, si te pones a la defensiva y empiezas a pelear sin tener los argumentos bien establecidos, lo único que vas a provocar es que tu pareja se cierre más. Si la está pasando mal por algún motivo, necesita compresión, alguien que sea capaz de ponerse en sus zapatos y que no juzgue. La vida en pareja no es fácil, las altas y bajas son completamente normales. La clave está en verlas como oportunidades y no como amenazas.
Tu pareja no necesita ser señalada
Ten en cuenta que por más que ames a tu pareja y quieras solucionar las cosas, no te corresponde a ti salvarlo en ningún sentido, que tenga o no voluntad, hará un gran cambio. El diálogo es lo único que los puede ayudar a analizar los miedos de ambos. Si es necesario, hay que consultar a un especialista, que los ayude a canalizar sus emociones.
Tu pareja no quiere tener relaciones por…
Lo cierto, es que rara vez un hombre pierde las ganas de estar con su pareja de la noche a la mañana. Además, le puede pasar tanto a ella como a él, depende mucho de la manera en la que están llevando el vínculo. A veces, son tantas las preocupaciones o las discusiones que tienen durante el día, que claramente en lo último que piensan es en tener acción. Entonces, caen en un círculo vicioso, en el que esperas tanto de la otra persona, que mejor se niega a hacerlo.
Sin embargo, no asumas, pregunta. Si tu autoestima no se encuentra reforzada, probablemente empieces a sentirte rechazada, asumiendo que es por tu falta de atractivo que no quiere estar contigo. Hay muchas otras razones, incluso mentales y físicas, que pueden estar causando la situación.
¿Qué pasa por su mente?
Por supuesto, te estoy hablando en términos generales, pero cuando un hombre pone una barrera bajo las sábanas, es muy probable que no se sienta cómodo con algún tema inconcluso entre ustedes dos. Es decir, puede que los problemas hayan ido aumentando, ya no es lo mismo, como si una crisis los estuviera rondando y eso hace que se forme la tensión. Si tu pareja no se siente bien con eso, no va a tener cabeza para algo más, su única defensa es no tener relaciones, porque no sabe cómo canalizar lo que está viviendo.
Ahora bien, nadie dijo que la relación de pareja es miel sobre hojuelas, convivir con una persona todos los días requiere paciencia, voluntad y mucha creatividad. Si caen en la monotonía las relaciones se vuelven predecibles, no hay nada nuevo y eso provoca que sean aburridas y poco interesantes. Se vale que tomes la iniciativa, que busques la manera de volver a encender la llama, invita a tu pareja a que hagan algo que nunca han hecho. ¿Por qué no?
Problemas emocionales
Desde luego, es posible que tu pareja esté atravesando por problemas que no quiere compartir, para no preocuparte. Sin embargo, los cambios que experimentan su mente y sus emociones, influyen a la hora del acto. Ninguna persona que esté atravesando por períodos fuertes de estrés, ansiedad, miedo y depresión, se siente cómoda al tener relaciones. En ese caso lo mejor es intentar ir hasta el fondo, abrir el canal para que esa persona confíe en ti y pueda expresar lo que le está pasando.
Por otro lado, la parte física también puede ser una de las razones, es posible que tu pareja esté experimentando una disfunción y ni siquiera lo sepa. De ahí que lo mejor es consultar a un médico, los altibajos también pueden deberse a un problema más grave. Por ejemplo: problemas hormonales, la toma de medicamentos e incluso diabetes u otro padecimiento. Los síntomas experimentados pueden alterar las ganas de estar contigo.
Habla sin miedo con tu pareja
Si ya es un hecho que tú y tu pareja no tienen relaciones, es decir, llevan un largo tiempo así, entonces lo mejor que puedes hacer es afrontarlo. No te ciegues ni intentes justificar lo evidente. Dile a tu pareja cómo te sientes, que sepa que también la estás pasando mal, quizás eso le ayude a soltarse. Ten en cuenta que no es algo que se pueda resolver mágicamente, necesitan poner de su parte ambos, lo mejor es buscar ayuda profesional, la terapia ayuda a no precipitar las cosas y poder recuperar lo que tenían.
¡Sal a caminar con tu pareja! Hagan cosas nuevas juntos, hablen de eso que les gustaría a hacer, pero nunca se han atrevido, eso puede ser un plus para mejorar. ¡Sálvense!
Texto original: albertespinola.com © Todos los derechos reservados