¿Cuántas veces te ha golpeado la vida? ¿Cuántas veces las personas te han hecho dudar del amor? Puede que haya sido muchas veces, puede que ya hayas desistido de creer que hay personas honestas y dispuestas a amar verdaderamente. Te entiendo, no es fácil volver al mismo camino del amor. Pero, ¿sabes qué? No todas las personas son iguales, así como tú creces de las experiencias, los demás también. Lo que debemos aprender a desarrollar es cómo reconocer cuando alguien no está dispuesto a amarnos.
Y lo cierto es que el amor es una zona de guerra, tienes que ser un estratega y abordar tu conquista con inteligencia. Nunca sabrás cómo es esa persona realmente si no tomas el riesgo de abalanzarte y luchar por ella.
El amor es arriesgarte, es intentarlo, a sabiendas de que puedes ser lastimado, te entregas porque el amor sin sacrificio es aburrido, el amor sin pasión no es nada. Amar es arriesgaste a ser rechazado, es arriesgarte a no recibir el mismo amor de vuelta. ¿Y sabes por qué?
- Amar es un viaje hacia un lugar desconocido, uno del que te hablaron y del que quieres conocer con tus propios ojos. No sabes si el destino te gustará, pero te arriesgas.
- Amar a veces no tiene mucha lógica, simplemente nos lanzamos al vacío con la esperanza de que nos amen. Y hacerlo es muy satisfactorio.
- El amor no sabe de reglas ni normas sociales, actúa y consume. Si no te arriesgas amando jamás experimentarás lo que es verdadera pasión.
- El amor son incontables preguntas sin respuestas. Son dudas, son incógnitas. Pero develar esos misterios te lleva al éxtasis.
Si te pones a pensar demasiado qué pasará, o te preguntas una y otra vez si te van a decepcionar, si van a romperte el corazón, si de pronto se le acabará el amor y te abandonará, entonces ya estás perdiendo en el campo del amor. Todo es posible, tal vez quieran aprovecharse de ti, tal vez te quieran para siempre, tal vez solo querían probar, tal vez solo quieran amar. No lo sabes. Por ello es tan excitante el misterio del amor.
Pero el miedo te puede ganar, puede que tú mismo te encargues de sabotear una relación porque crees que tarde o temprano te iban a hacer daño. Y lo haces justo cuando empezaba a ser maravilloso y esa es precisamente la razón. Todo ha sido tan oscuro para ti que cuando vez la luz crees que es mentira, que es una señal antes de la traición y el dolor profundo.
Ahora bien, quiero que te grabes lo siguiente: Si cierras tu corazón por no tomar el riesgo de ser lastimado, jamás encontrarás el verdadero amor. Mereces lo mejor, solo debes esperar que llegue, no te prives de la felicidad y no te cierres a ella cuando la tienes en frente.
Comprendo que la angustia pueda apoderarse de ti, pero no es peor que la amargura que crece en tu corazón cuando no dejas que nadie entre allí solo por temor a que te lo rompan. Sentir ese dolor es la prueba de que estás vivo, de que no te rindes, de que amas y vives tu vida al máximo. El dolor es la prueba de que existimos, no lo es la felicidad, porque sin dolor las alegrías no serían tan placenteras.
Recuerda entonces, estar de verdad enamorado es estar dispuesto a correr el riesgo. Es aceptar que quizá la relación sea difícil y no funcione, aceptar que pueden romperte el corazón. Aceptar todos los riesgos para obtener todo lo bueno.
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