Por favor, no te atrevas a decirle a una persona que la amas si no lo vas a hacer verdaderamente y con gran intensidad. La vida es demasiado corta, todos anhelamos experimentarla al máximo, por lo que es cruel y muy mediocre vivir parte de nuestras vidas con un amor a medias. Si no vas a mirar a tu pareja con pasión, si no vas a sostenerle la mano con fuerza, si no vas a estar presente siempre que te necesite porque te importa, entonces es mejor que te alejes.
Si no puedes dejar ir a una persona porque no quieres quedarte sin sus besos, sin sus ocurrencias, sus caricias y su calor pero aún no sientes esa pasión de amarla, entonces no lo hagas, la relación se irá profundizando, pero por favor, no digas que la amas como si fuera cierto porque no lo es.
Si no vas a amar como si se tratara del último día de la existencia de la humanidad, entonces no digas que sí la amas. Amar es ese sentimiento que pone tus neuronas a funcionar mucho más rápido, no sabes ni lo que ocurre en tu cerebro y solo deseas pasar todo el tiempo con esa otra persona porque te hace feliz. Amar es tener las emociones a flor de piel, amar es no tener duda, es mirar a los ojos y encontrar un hogar, una sonrisa y abundante pasión.
Si tus sentimientos aún están muy fríos entonces no puedes decir que amas a tu pareja. Tienes que verla como lo más increíble y maravilloso que has visto en tu vida, de lo contrario no es amor. No ames a medias, le haces daño a esa persona que dices amar y te haces daño a ti mismo.
Sé que puede ser difícil entregarte por completo si antes te han herido muchas veces, pero te dejaré un consejo de vida: Puedes ser cuidadoso y proteger tu corazón, pero no te limites demasiado, recuerda que la vida “son 3 días”, es muy corta como para vivirla sin pasión, sin intensidad. No te arrepientas de las equivocaciones porque esas te hacen crecer más rápido y disfrutar más de las relaciones interpersonales en el futuro.
- Por favor, ama como si nunca te hubieran herido y sonríe, arriésgate.
- Ama con libertad, sin aferrarte y sin atar.
- Ama sin cesar la intensidad; cada día gestiona ese amor, aliméntalo, constrúyelo hasta que sea un palacio, para entonces puedes seguir creando jardines.
- Ama sin poner condiciones y sin crear expectativas.
- Ama con honestidad, siempre con mente abierta y permitiendo que te amen de vuelta.
- Ama con ferocidad, con entusiasmo, con verdadera intención, poniendo todo tu corazón y cuidando de las almas que tanto aprecias.
- Demuéstrale a la persona que amas que te importa, que quieres ser vulnerable y develar tu alma para compenetrarse más.
Si no estás dispuesto a amar así, entonces ni te molestes en intentarlo porque no hay nada más mediocre y devastador que las cosas a medias, mucho más en el amor. Si no puedes amar así, entonces deja ir a esa persona porque el amor sin intención no tiene propósito.
Basta de decir que sí amas a alguien cuando ni si quieras estás presente cuando te necesita. No digas esa falsedad si no estás dispuesto a hacer planes y alimentar el amor siempre. Si no te sientes involucrado en mente, cuerpo y alma, entonces no digas que le amas.
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